Hoy se conmemoró el 50 aniversario de la apertura del Museo Nacional del Virreinato, que está dedicado a conservar investigar, exhibir y difundir las manifestaciones artísticas y culturales de la época virreinal y tiene por sede el ex colegio jesuita de Tepotzotlán, ubicado en el Estado de México.
Se localiza a sólo 55 minutos de la Ciudad de México, el cual resguarda un acervo de casi 34 mil piezas que datan principalmente de los siglos XVI al XIX; los objetos que conforman la colección van desde pintura, escultura, gráfica, artes decorativas o suntuarias, libros e instrumentos musicales. El Museo se inauguró el 19 de septiembre de 1964 por iniciativa del ex presidente Adolfo López Mateos.
El origen de estos objetos viene del antiguo colegio de Tepotzotlán y se sumaron otras piezas procedentes del Museo Nacional de Antropología, del Museo Nacional de Historia, de la zona arqueológica de Teotihuacán y del museo de arte religioso de la Catedral de México.
Elisa Vargas Lugo, investigadora de la UNAM, desde 1953, destacó la indudable importancia de éste museo, en el panorama de la historia de México, al hablar de la creación detallada de este magno espacio.
Teresa Franco, directora del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) , dijo que la creación del Museo Nacional del Virreinato, respondió a un planteamiento que se enlazaba con el proyecto del Museo Nacional de Antropología y la revitalización del Museo de Historia Natural.
En el altar mayor del templo de San Francisco Javier, construido en 1770, la directora del INAH le entregó a la doctora Vargas Lugo la Medalla Conmemorativa del Museo, así como a otras personalidades.
Esta misma distinción se le entregó a Avecita López Mateos, hija del ex presidente Adolfo López Mateos, fundador del Museo Nacional del Virreinato.