El pleno del Senado avaló por unanimidad, el dictamen para fortalecer el sistema de salud de las Fuerzas Armadas, a fin de garantizar el bienestar de su personal, su operatividad y eficacia en el cumplimiento de sus funciones.
El proyecto, que fue aprobado con 93 votos a favor y turnado al Ejecutivo Federal, reforma y adiciona diversas disposiciones de la Ley de Ascensos y Recompensas del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos.
El dictamen avalado, fomenta la permanencia en el servicio activo de los médicos cirujanos militares, que continúen su desarrollo profesional mediante la realización de diversas especialidades que imparte la Escuela Militar de Graduados de Sanidad.
De esta manera, los mayores y oficiales médicos cirujanos que estén realizando una especialidad con una duración mínima de tres años en la Escuela Militar de Graduados de Sanidad, podrán ser ascendidos sin presentar los exámenes teóricos, por rigurosa escala jerárquica hasta el grado de teniente coronel, cuando tengan derecho a participar en la promoción general.
Además, los mayores y oficiales médicos cirujanos que acrediten una especialidad con una duración mínima de tres años en la Escuela Militar de Graduados de Sanidad o en otra institución educativa nacional o internacional, que cuenten con cédula profesional y certificado de especialistas expedido por el Comité Nacional de Consejos de Especialidades Médicas y reúnan los requisitos establecidos, podrán ascender hasta teniente coronel.
El dictamen también actualiza la denominación de escuelas militares, para homologarlas con otros planteles e incorpora el uso de lenguaje inclusivo en la referencia a la persona titular de la Presidencia de la República.
La presidenta de la Comisión de Defensa Nacional, Ana Lilia Rivera Rivera, sostuvo que el dictamen busca fortalecer la atención médica en las Fuerzas Armadas, porque “detrás del uniforme de la disciplina, del deber cumplido, hay personas, mujeres y hombres que también enferman, que también se desgastan, que también necesitan cuidado y atención oportuna”.
En los últimos años, advirtió la legisladora, México ha enfrentado una profunda escasez de personal médico especializado y nuestras instituciones militares no han sido la excepción.
Dijo que la falta de este personal calificado no sólo pone en riesgo la salud de quienes sirven a la nación, sino que también compromete la operatividad de las Fuerzas Armadas cuando no hay suficientes especialistas para atender fracturas, heridas de combate, enfermedades cardiovasculares o emergencias médicas y “estamos dejando en la incertidumbre a quienes arriesgan su vida por la seguridad de todas y todos”.
Con esta reforma, agregó, “queremos cambiar esa realidad, queremos que más médicos y médicas militares tengan razones para quedarse, para seguir formándose, para continuar prestando su invaluable servicio dentro del Ejército y la Fuerza Aérea”.
LG