Vendedores de gas LP protestaron en la ciudad de Tijuana debido a que denuncian un tope a las tarifas del combustible impuesto por el Gobierno Federal.
Aseguraron que las empresas ya no les permiten trabajar más de cuatro o cinco horas al día, y que las ganancias también disminuyeron para las compañías.
El repartidor de gas estacionario de Baja Gas, Manuel Rodríguez, explicó que, al ser comisionista, el tope a la tarifa por litro lo afecta directamente, ya que sólo pueden vender en un horario limitado de lunes a viernes, pues los fines de semana ya no tienen permitido laborar.
En mantas colocadas en las pipas de gas, los trabajadores también exigieron frenar el 'gaschicoleo', que consiste en la venta de gas sin el pago de impuestos a la aduana. Este se comercializa a bajo costo en colonias populares, sin cumplir con las medidas de seguridad en las estaciones.
“No tenemos un horario laboral adecuado. Redujeron las horas; se supone que deben ser ocho, pero trabajamos sólo cuatro o cinco, porque a las cuatro ya no podemos repartir”, expresó el empleado.
El gerente de Zeta Gas, Luis Ángel Grana, explicó que el Gobierno estableció el tope del gas doméstico en 10.64 pesos para este 2025, cuando en 2021 se vendía en 10.56 pesos por litro.
“Pueden ustedes sacar el incremento que ha tenido el gas: es de ocho centavos”, expresó, y por eso piden al gobierno que libere el precio del combustible.
En Baja California, recordó, el gas se importaba de Estados Unidos, lo que hace que el tipo de cambio peso-dólar, además de la molécula que compran de propano.
“Esto es lo que nos ha reducido los gastos de operación y por eso el recorte de horas laborales".
MML